viernes, 25 de septiembre de 2009

Este Blog es un homenaje a mi gran perro Zeus, fidelidad, valentía, fortaleza y espíritu que lo hicieron un campeón, pese a no ser un perro con pedigrí siempre se destaco en competencia y se ha hecho querer como a ninguno.

Adiestramiento Canino


Zeus en competencia de Agility, bóxer de Jorge Marín
Zeus Marín (Q.E.P.D.)
 A la hora de trabajar con razas de perros podremos escoger muchas que por su aptitud y condición para el trabajo se han destacado por años, las razas que mencionaré son razas que aprenden fácil y sin necesidad de recurrir a golosinas o premios cada vez que ejecutan un mando correctamente, no quiero decir que adiestrar por medio de la técnica de la recompensa con golosinas no sea adecuada, si lo es y en algunos casos podremos utilizarla para adiestrar a nuestro amigo canino. Las razas que mencionare a continuación pueden adiestrase sin necesidad de este tipo re premios, dejo a su elección como entrenarlo, el resultado será el mismo.

El Bóxer, Gran Danés, Schnauzer mediano y Gigante, Pastor Collie, Doberman, Dogo Argentino, Airdale Terrier y Pastor Alemán son razas que debido a su temperamento y disposición aprenden fácil sin necesidad de golosinas, podremos trabajar con otras muchas razas pero su disposición no es la misma que el de las razas anteriores. Razas tan importantes como el Pastores Belga, el Labrador, y otras muchas más en las cuales encontraremos alumnos que aprenderán y nos sorprenderán con los resultados obtenidos después de un adiestramiento basados en una buena comunicación y buen trato.

Todo perro sin importar su raza debería ser adiestrado con el fin de lograr un mejor comportamiento de nuestra mascota en su nuevo hogar con el fin de crear un lenguaje mutuo con el cual nos comuniquemos con nuestro amigo, podremos adiestrarlo para trabajo, para defensa o simplemente para lograr una mejor convivencia en el hogar con nuestro perro.

Lo primero que tendremos en cuenta en lo posible es escoger un buen perro independiente de la raza que nos guste su temperamento será primordial si tenemos la posibilidad de escoger un cachorro procuraremos uno con buena disposición, que nos preste atención fácilmente y que no se distraiga ni pierda el interés en nosotros.

Un buen perro para adiestrar no deberá tener tendencias agresivas ni gusto por morder, estos hábitos que se manifiestan desde temprana edad no son buenas señales a la hora de escoger un excelente compañero. El buen perro además debe de ser calmado ante la presencia de otras personas, es falso creer que el perro más agresivo es el más valiente. Al momento de entrenar un perro para la guarda y la defensa pondremos sumo cuidado de no entrenar mal a nuestro perro y convertirlo en un peligro para la sociedad de allí la importancia de seleccionar un buen ejemplar y entrenar con un buen método a nuestro amigo, para evitar que encause mal lo aprendido.

El carácter de un buen perro será firme a las reprimendas, no será temeroso, o sumiso, no mostrará miedo hacia el entrenador, le mirara a los ojos y nunca de lado, un perro muy sometido o sumiso no resultara un buen alumno y será causante de muchos dolores de cabeza, por eso es tan importante saber identificar un buen ejemplar para el adiestramiento y más cuando se trata de entrenarle para la guara y la defensa. A su vez el entrenador también debe contar con características fundamentales para trabajar como adiestrador canino la relación hombre perro deberá ser muy armoniosa, para ello el adiestrador (a) deberá ser calmado, paciente, perseverante y tener tacto para obtener los mejores resultados. Las épocas en las cuales se entrenaban a los perros a punta de castigos y reprimendas ya ha pasado de moda quedando atrás ahora se entrena con tacto, amor hacia los perros, era común ver perros oficiales en eventos de obediencia que hacían maravillas pero con la cola entre las patas esto denotaba sumisión ante el guía por el maltrato recibido durante el período de adiestramiento, hoy vemos mejores resultados con perros que hacen su trabajo alegremente sin mostrar el más mínimo temor hacia su entrenador.

Sin Calma, sin medir ni dominar los nervios, se malogrará todo el programa de aprendizaje y al perro, y muy difícilmente podrá ser recuperado.

Sin el tacto que permite administrar suavidad y severidad durante el trabajo, sin llegar a someter ni maltratar a nuestro amigo rindiendo su carácter, se anularan por completo las cualidades innatas del perro y se le convertirá en un autómata sometido que trabajara mediocremente por darnos gusto por temor a un castigo. En el interior muy probablemente nuestro perro nos tendrá temor y hasta rabia por haberle convertido en un ser sometido sin personalidad.

La falta de perseverancia, reduce notablemente el rendimiento, ya que al intentar quemar etapas sólo se conseguirá confundir al perro evitando así una buena respuesta a la disciplina, que será la que finalmente formará unas bases sólidas para un buen trabajo amo perro.

María Alejandra con Zeus
El comportamiento canino es el resultado de diversas respuestas que van desde el simple instinto (inconsciente) hasta la reacción consiente a una orden que ha sido impartida por el instructor o guía. El proceso de aprendizaje es un proceso consciente y por eso debe de ir acompañado por experiencias gratas para el perro que le permitan desarrollar plenamente su potencial, para impartir una orden a un perro primero hay que trabajarle varias veces en un proceso de repetición y estimulo que cuya respuesta será la ejecución de la orden por el perro como un simple “Sit” sentado o “Down” echado, las ordenes deben de ser precisas para obtener una respuesta rápida, no bebemos confundir al perro siempre utilizaremos la misma palabra para cada orden acompañada por un gesto corporal por parte del guía, este último ayudara a reforzar la orden de una manera más eficaz. Así con repetición de ordenes de manera ordenada y paulatina iremos agregando una y otra hasta lograr un repertorio inmenso que hará de nuestro perro todo un ejemplo a seguir, las sesiones deben de ser amenas y no prolongarse mucho en el tiempo, tendremos que mantener la atención de nuestro perro y esto se logra no cansándole con rutinas largas y monótonas, es mejor enseñar una o dos órdenes y pasar al juego que querer enseñarle todo en un solo día, los perros son muy inteligentes pero si queremos tener buenos resultados mejor haremos las cosas con mucha calma y sin afanes.