miércoles, 30 de diciembre de 2009

La Obesidad Canina

Extractado de La enciclopedia de Nutricion clinica Canina (Pascale Píbot, Vincent Biourge y Denise Elliot )

La obesidad canina es una seria enfermedad que reduce la longevidad de los animales. Tratar la obesidad en nuestro perro no siempre es fácil ya que necesitamos de mucha conducta de nuestra parte para que esto se pueda realizar con éxito. Deberemos, primero saber cuáles son los factores de riesgo que trae aparejada esta enfermedad para poder tomar conciencia y llevar un plan estricto para que nuestro perro disminuya su peso.


¿Qué es la obesidad?

La obesidad es un estado de enfermedad que se caracteriza por un exceso de grasa y que trae aparejadas modificaciones en las funciones del organismo.


En los países más industrializados parece ser que la obesidad canina es un problema creciente y que hoy oscila entre un 20 y un 30 %.


¿Cuales son los factores de riesgo?


Factores genéticos


Es un complejo mecanismo, determinados geneticamente y es responsable de mantener un equilibrio exacto entre lo que nuestro perro come y lo que gasta.


Los perros salvajes estaban adaptados geneticamente para sobrevivir en épocas de escasez de alimentos. Pero nuestros perros domésticos, que tienen una gran abundancia de alimento y espacios reducidos, sus organismos, parece ser, que no se adaptan bien a equilibrar entre lo que comen y lo que gastan. Aunque esto también es controvertido, pues mientras algunos animales son obesos, otros mantenidos en el mismo espacio y las mismas condiciones mantienen su estado de peso ideal.


Distinguir entre factores que tienen que ver con el medio ambiente y factores que tienen que ver con lo genético no es fácil y hasta el día de hoy no son bien comprendidos. Visítanos en http://www.paisasin.com/ sección de mascotas

sábado, 21 de noviembre de 2009

Los parásitos internos en los perros

Los parásitos internos son pequeños organismos vivos que se alimentan de otros organismos vivos. Los parásitos internos más frecuentes son los gusanos. Los hay de dos tipos: redondos y planos.

¿Cómo afectan los gusanos a mi perro?
Los gusanos se albergan en el intestino del perro y se alimentan de la sangre y de los nutrientes que encuentran allí. Así mismo desde el intestino pueden extenderte a otros órganos como son los riñones, pulmones, etc., causando daños a nuestro perro.

Los daños que causan pueden ser muy variados y tener graves consecuencias, desde lesiones en los tejidos hasta obstrucción intestinal, provocando infecciones graves e incluso ocasionando la muerte del perro.

¿Cómo detectar una invasión de gusanos?
Los gusanos son difíciles de detectar ya los síntomas apenas se detectan en el perro cuando la infestación está avanzada y estos empiezan a salir en las deposiciones. Además la mayoría no se puede ver en las deposiciones, a simple ojo, solo podemos observar un porcentaje muy pequeño. El hecho que no los veamos no significa que no están, es conveniente hacer un examen de las deposiciones cundo tengamos sospechas, ante la aparición de síntomas que nos pueden indicar que algo no anda bien, los síntomas más comunes son: disminución de vitalidad, pelo sin brillo, pérdida de peso, vientre abultado, anemia, trastornos de la fertilidad, etc.

El contagio de los perros
Los parásitos, sus huevos y sus larvas se encuentran en todas partes alrededor nuestro. Los huevos de algunos parásitos pueden sobrevivir muchos años en el exterior.

Normalmente al nacer los cachorros ya están infectados por los parásitos y más cuando sus progenitores no han sido desparasitados con anterioridad a la monta, o si no, estos se infectan a una edad muy temprana, con lo cual tenemos que estar muy alerta. Las pulgas y las moscas suelen traer consigo infecciones por parásitos uno de ellos, el dipylidium caninum, necesita para cumplir su ciclo biológico a la pulga. Si un perro o gato ingiere una pulga infestada con las larvas de este parásito la larva pasa al intestino del animal y evoluciona hacia una tenia adulta.

Bovinos, ovinos, porcinos, animales silvestres, perros, gatos y también el hombre pueden servir de intermediarios para que determinados gusanos planos cumplan su ciclo biológico. La ingestión de vísceras crudas permite la infestación con este tipo de parásitos entre otros motivos. Muchas veces estas tenias no provocan síntomas pero en algunos animales pueden provocar diarreas leves y un aspecto débil; pueden presentar accesos de excitabilidad cuando los segmentos de las tenias adultas se desprenden e irritan el ano. En la materia fecal suelen observarse estos segmentos, parecidos a los granos de arroz. La mejor forma de evitar la infestación en nuestro perro o gato es tratando de que no tengan pulgas, que no coman vísceras crudas y corrigiendo los hábitos de caza de pequeños roedores.

Cuando adquirimos un cachorro en un criadero, debemos tener en cuenta las condiciones de higiene en que se encuentra el lugar

¿Cómo se eliminan los parásitos internos?
Hay muchos productos en el mercado que eliminan los parásitos intestinales ( Canisan Fpe, Panacur para cachorros y Drontal o Milbemax para perros adultos). Los productos comerciales vienen en comprimidos, jarabes y pastas. Lo importante es utilizar un producto que cubra el máximo tipo de gusanos posible.

La mejor persona para aconsejarte sobre el producto adecuado para tu perro es el veterinario.

Recomendamos desparasitar a los cachorros a partir de la segunda semana de vida y repetir cada dos semanas hasta la duodécima semana. A partir de allí se deberá desparasitar al perro cada 3 meses durante el resto de su vida.

¿Pueden contagiarse las personas?
Los gusanos pueden contagiarse a personas. Los niños corren más riesgo ya que por su estilo de vida son más propensos al contagio.

Las vías de transmisión en personas pueden ser:

Vía oral:
Por ejemplo cuando un perro no desparasitado lame las manos y la cara de su dueño puede transmitirle huevos de parásitos.

Por contacto con el perro
Simplemente acariciando a tu perro, si este está infectado te puedes contagiar.

Por contacto con el entorno

Por ejemplo cuando tocas tierra o arena contaminada.

Los niños corren más riesgo porque todavía no se dan cuenta del peligro. Suelen poner sus manos en la boca cuando están jugando con la tierra en un parque. Por eso es importante evitar que los niños pequeños jueguen en lugares donde se pasean perros.

¿Cómo afectan los gusanos a las personas?
Los síntomas en las personas normalmente son de poca importancia y dependen de muchos factores, pero eso si, en raras ocasiones pueden provocar lesiones en los ojos e incluso la muerte.

¿Cómo se previene el contagio?
Unos consejos básicos:

1. Recoge siempre las heces de tu perro y tíralas a la basura.
2. Evita que los niños metan juguetes o sus manos en la boca cuando jueguen en el parque, sobre todo si la zona es frecuentada por perros.
3. Evita que las mascotas tengan acceso a las zonas de recreo.
4. Lava las manos después de tocar o acariciar un perro.
5. Lava las verduras crudas antes de comerlas.
6. No duermas con tu perro, ni dejes que te lame, al menos que este muy bien desparasitado.
7. Desparasitar bien a tu perro significa tratarle cada 3 meses.

Si sigues estos concejos tanto tú como tu perro podréis dormir sobre las dos orejas. Visítanos en http://www.paisasin.com/

jueves, 22 de octubre de 2009

Alimentos clave para combatir las molestas plagas que invaden a nuestras mascotas

Josep Arnau, nutricionista, nos aconseja la levadura de cerveza como un complemento alimenticio vital. Según varios estudios, la vitamina B1 da a nuestras mascotas un olor que repele a los insectos. Además, supone un aporte muy importante de hierro, B12, zinc, cromo, proteínas y vitaminas del grupo B.
Otras sustancias llenas de beneficios para nuestras mascotas son la caléndula, el aceite del árbol del té, el propóleo y el aloe vera. Estas esencias suelen aplicarse en el baño junto con el champú y ayudan a hidratar la piel de nuestros animales de compañía a la vez que alejan a los parásitos debido a su peculiar olor.
Estos 10 trucos son muy eficaces y se les ha comprobado su eficacia, lo mejor no tienen efectos secundarios, no son tóxicos para el medio ambiente, son económicos y se pueden usar en cachorros, hembras gestantes o geriátricos:
1. Esparcir semillas de camomila, lavanda o cilantro en la cama del animal. También podemos plantarlas en el jardín.
2. Masajearle por todo el cuerpo con aceite de eucalipto.
3. Colocar bolsitas con ramas de eucalipto debajo de las camas de las mascotas.
4. Agregar levadura de cerveza y polvo de ajo a las comidas.
5. Fumigar la casa, poniendo especial énfasis en las zonas donde está la mascota, con agua y aceite de lavanda.
6. Mezclar 30 ml de aceite de oliva con 10 gotas de aceite esencial de lavanda, tomillo y eucalipto y echarlo por el lugar infectado.
7. Bañar al animal con abundante agua, en la que previamente habremos cocido cáscara de limón.
8. Contra las
garrapatas el remedio más eficaz es colocar hojas secas de poleo en la cama o bañar a nuestro perro con una infusión muy concentrada de esta hierba.
9. Si queremos luchar contra los
ácaros, lo mejor es poner unas gotas de glicerina y caléndula dentro del conducto auditivo del animal. La primera mata a los parásitos debido a su fuerte olor y la segunda nos ayuda a calmar la irritación de la zona.
10. En cualquier caso, acabar el
baño con un chorro de vinagre de manzana mantiene alejados a los parásitos y hace que el manto esté más sano y brillante.

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miércoles, 14 de octubre de 2009

Cómo Jugar con el Cachorro

El juego es la forma en que los cachorros aprenden a relacionarse con el grupo, incluyendo los aspectos cinegéticos (la cacería). Al encarar la relación, el juego determina quién tiene un rango superior, quién es líder y quién organiza la manada.Pensemos cómo se desarrollan los juegos y la enseñanza en un grupo de lobos.Cuándo el cachorro ha superado su primera etapa infantil, aproximadamente a los 3 meses de edad, debe iniciarse en las técnicas de caza y los roles sociales del grupo. Ambos aspectos están estrechamente relacionados, ya que el lobo es un cazador cooperativo, con una organización social que se manifiesta claramente durante la caza.
El primer paso en la introducción al arte de cazar se da cazando a un adulto. Un lobo adulto, generalmente el lobo alfa o líder, adopta el papel de víctima y los cachorros lo acosan y persiguen. Paulatinamente el líder agrega dificultades a la "clase", tomando mayor distancia, escondiéndose, buscando terrenos más complicados.


El próximo paso es la utilización de un "reclamo de caza"। Los adultos han guardado a tal efecto un animal muerto, por ejemplo un conejo, y corren delante de los cachorros haciendo que éstos intenten atrapar la presa que ellos portan.

¿Cuál es el reclamo de caza en nuestros juegos con un cachorro?, si prestamos atención una pelota o un palo arrojado es ?cazado? por nuestro perro ... sí, al jugar con un objeto estamos haciendo que nuestro perro cace su juguete। Todo juego con objetos es un ritual de cacería en la mente de nuestra mascota.

He aquí la respuesta a muchos de los comportamientos indeseados de nuestros perros. ¿por qué algunos perros huyen de sus propietarios?, prescindiendo de aquellos casos en que nos encontremos a propietarios brutales que imprimen el temor de sus mascotas, muchas veces se trata de una conducta originada en una iniciación errónea a los juegos।

Es muy común que un amo juegue persiguiendo a su perro, y es muy común que su perro adopte entonces el papel de líder en el juego, ya sea poniéndose él mismo en papel de presa o llevando un reclamo en la boca।

Lo correcto es SIEMPRE jugar con el cachorro siendo nosotros las presas. El cachorro debe invariablemente perseguir al amo. De esta manera en su mente será el amo el líder y él el alumno.
Puedes jugar con un reclamo de caza, sea un trapo, una pelota, un palo, o lo que sea, pero siempre debe ser el cachorro quién te persiga।

Si usas este método de juegos, difícilmente tu perro cogerá el vicio de escapar.

viernes, 9 de octubre de 2009

Los perros pueden aprender palabras de la misma forma que los niños pequeños, según una investigación alemana

Estos animales, al igual que los bebés, son capaces de relacionar un objeto con una palabra mediante un proceso cognitivo de asociación rápida
En los primeros años de vida, los niños amplían progresivamente su vocabulario gracias a una habilidad innata para formar rápidamente hipótesis sobre el significado de una nueva palabra cuando por primera vez aparece vinculada a un objeto. Esa habilidad para relacionar rápidamente un objeto con una palabra se basa en un proceso de discriminación por exclusión que los especialistas en aprendizaje del lenguaje llaman "fast mapping". Un estudio de científicos del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva, en Leizpig (Alemania), demuestra ahora que los perros pueden ampliar el número de palabras que entienden a través de ese mismo proceso cognitivo de asociación rápida. Quien ha contribuido a demostrarlo es Rico, un border collie de 9 años que puede reconocer 200 palabras, un vocabulario comparable al de algunos chimpancés, delfines y loros entrenados.


Para verificar que Rico reconoce por su nombre numerosos objetos, en su mayoría muñecos y pelotas con las que juega habitualmente, los investigadores alemanes hicieron un experimento. En una habitación colocaron diversos objetos elegidos al azar de esa colección de 200 juguetes. En otra sala aguardaban el perro y su propietario. Cuando a instancias de un científico el dueño del animal nombraba un objeto, Rico se dirigía a la primera habitación para buscarlo, cogerlo con sus fauces y llevarlo a su amo. Acertó 37 de 40.

Superada esa prueba, los investigadores quisieron averiguar cómo aprendía nuevas palabras. Con ese fin colocaron en una habitación un nuevo juguete entre siete que eran familiares para Rico. Luego, desde la otra sala, se pedía al perro que trajera el nuevo juguete utilizando una palabra que nunca había oído, por ejemplo "calcetín". El experimento se realizó diez veces con diferentes objetos. Rico acertó en siete ocasiones. Aparentemente asumió, como hacen los niños, que las nuevas palabras hacían referencia a objetos que carecían de nombre para él.

Un mes después, sin que Rico hubiera tenido más contacto con los nuevos objetos que conoció cuatro semanas antes, se repitió el experimento con alguna variación. En cada prueba, uno de esos nuevos objetos, por ejemplo un calcetín, era colocado en una habitación junto a cuatro que eran conocidos por Rico y otros cuatro completamente desconocidos. El border collie acertó en tres de las seis sesiones, lo que significaba que había memorizado las palabras que aprendió un mes antes. Esto no implica que Rico tenga un grado de comprensión del lenguaje como un niño pequeño, sino una capacidad semejante para asociar objetos y sonidos porque perros y niños pueden usar el mismo método de aprendizaje.

A la luz del experimento, los científicos alemanes proponen que habilidades lingüísticas aparentemente complejas, hasta ahora sólo observadas en niños, pueden estar reguladas por estructuras cognitivas mucho más simples que existen en otras especies. De hecho, piensan que ciertos aspectos de la comprensión del habla evolucionaron antes, y de forma independiente, que el lenguaje humano.

Paul Bloom, del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Yale (EE.UU.), sugiere que esta capacidad de asociación rápida para aprender nuevas palabras existe en los perros porque son animales domésticos que se han especializado en interpretar las intenciones comunicativas de las personas.

lunes, 5 de octubre de 2009

¿Cuándo y en dónde entrenar a nuestro perro?

Lo más indicado es que le entrenes antes de la hora de comer o pasadas unas dos o tres horas de que haya comido, no es bueno que lo entrenes con mucha hambre o bastante lleno, respecto al mejor lugar para iniciar las actividades de aprendizaje es en un lugar familiar para el perro, lejos de distracciones, puede ser en algún lugar de la casa con pocos obstáculos (muebles), como el garaje, una terraza, el patio o una habitación desocupada o con espacio suficiente. El perro debe de estar tranquilo y nosotros tendremos que ganarnos su atención, por lo que inicialmente no es conveniente adiestrarle en un parque o en una vía pública, pues en estos lugares lo más que conseguirás serán problemas.

Las clases deberán ser cortas enseñarle máximo dos o tres ejercicios por clase cada ejercicio lo repetiremos no más de 10 veces haciendo pausas para motivar y mantener la atención a nuestro perro, si no obtenemos la atención adecuada de nuestro perro es mejor dejar la clase para el día siguiente, una buena clase puede durar entre 10 15 minutos esto con el fin de no abrir a nuestro perro, a medida que el perro va avanzando en el aprendizaje debemos irle colocando factores de distracción de manera gradual, otras personas, ruidos o empezar a llevarlo a clases ahora si a otros lugares, siempre y cuando el perro ya este ejecutando de modo adecuado la rutina. Po r día deberás entrenar al perro entre una y tres veces, habrá individuos que requieren menos por su gran disposición al trabajo. Evita entrenar bajo el sol, los perros son propensos a recibir golpes de calor que pueden incluso matarles, es mejor a la sobra, tampoco lo entrenes si esta decaído o está enfermo, no lograras nada entrenándolo en esa condiciones.

Si estas entrenado una perra y está en calor deberás tener presente que el cambió hormonal podrá cambiar su disposición para entrenarla, además deberás llevarle a un sitio en el cual no corras riesgos con algún ejemplar macho que merodee el lugar.

Al momento de empezar lo primero es obtener toda la atención de tu perro antes de empezar con cualquier orden.

1 Ejercicio Ignorar la recompensa.

Sujeta en tu mano un pedazo de recompensa y llévalo hasta la nariz del perro sin dárselo, llámale su atención, el tratara de cogerla, brincara, pero no se la darás, en algún momento el deparará de saltar y te prestara atención, cuando el perro te mire a ti no a la recompensa habrás ganado su atención así no te mire a los ojos, sino a cualquier parte de tu cuerpo excluyendo el brazo en el que tienen es la recompensa, entonces procederás a hacerle un click o un chasquido o silbido o un simple muy bien (en señal de recompensa), y dale su recompensa. Repite este ejercicio hasta que logres su atención sin mucho esfuerzo, antes de pasar al siguiente ejercicio.

2 Ejercicio Ganar su atención mirada a la cara

Repite el ejercicio anterior pero esta vez hasta que tu perro te mire a la cara haz la señal de logro y recompénsalo, repite unas diez veces antes de pasar al ejercicio siguiente.(sólo si el perro aprendió a mirarte a la cara)

3 Ejercicio Ganar su atención mirada a los ojos

Repite el ejercicio anterior pero esta vez hasta que tu perro te mire a los ojos haz la señal de logro y recompénsalo, repite unas diez veces antes de pasar al ejercicio siguiente.(sólo si el perro aprendió a mirarte a los ojos)

4. Ejercicio bajando la recompensa

Repite el ejercicio anterior bajando el brazo paulatinamente hasta que logres tener la recompensa al lado de tu cuerpo, puedes hacerlo en dos o tres pasos.

5 Introducción a las órdenes de aprendizaje básico

Ahora le sumaras al ejercicio la palabra mírame, antes de que el te mire debes lograr un promedio de éxito del 80% para pasar al siguiente nivel

Cada que tu perro haga correctamente una orden beberás también irle enseñando a que obedezca sin una señal corporal, con paciencia y trabajo, lograremos que nuestro perro actué tanto ante una señal acústica, o una señal corporal, tiene sus ventajas que maneje ambos conceptos, lo importante es que definas muy claro las señales tanto sonora como acústicas para no confundir al perro, es conveniente saber si le voy a decir a mi perro “siéntate”, “sit”, “sitz” o “sentado”, todos dicen lo mismo pero es mejor siempre utilizar la misma palabra, así lograremos mejores resultados.

jueves, 1 de octubre de 2009

Obediencia básica

Antes de empezar con la educación de nuestro perro tendremos que tener en cuenta que los perros vienen de sociedades en las cuales la jerarquía es importante para la convivencia, por lo tanto cuando llevamos un perro a nuestro hogar lo primero que tenemos que enseñarle es que allí somos nosotros los líderes y el tendrá que seguirnos y obedecernos, una manera de enseñarle esto a nuestro perro es cuando es cachorro acostarlo de lado, le sostendremos su cabeza con una de nuestras manos, una rodilla presionaremos su torso contra el suelo y con la otra mano sujetaremos sus cuartos traseros, de esta manera inmovilizamos por un rato a nuestro amigo sin lastimarlo, él se dará cuenta de que nosotros somos más fuertes y empezara a vernos como su líder, este ritual es similar al que hacen ellos cuando viven en compañía de más perros y el más fuerte siempre somete a sus compañeros de convivencia sin necesidad de lastimarlos, a menos de que algún testarudo quiera ganar su lugar.

Cuando nos ganamos el respeto de nuestro perro tendremos más posibilidades de alcanzar buenos resultados en la educación de nuestro perro.

Nunca es tarde para educar a nuestro perro, contrario a lo que mucha gente dice que los perros viejos no aprenden porque traen vicios en la conducta difíciles de quitar, y yo puedo decirles que es falso, hace algunos años adopte una perra bóxer de la calle, llegó a mi casa con un estado de embarazo avanzado, algo de agresividad hacia los mendigos, y bastante voluntariosa, ella tenía aproximadamente tres años. La tarea no fue tan difícil, a la semana siguiente ella ya sabía quién mandaba en casa y que debía respetar también a Zeus mi perro, otro bóxer.

Cuando el perro llega cachorro la obediencia tendrá que ser más pausada con un poco de paciencia, pues los cachorros tienden a distraerse con mayor facilidad, nunca trabajaremos cuando nuestro perro este enfermo.

Elementos básicos para empezar con la clase de obediencia básica

Un collar normal que no sea de castigo
Dos correas, una de aproximada mente 1.5 metros y otra que puede tener entre 5 a 6 metros
Un juguete que le agrade a tu perro
Comida o golosinas en trozos pequeños del tamaño de un grano de garbanzo
Un Clicker (opcional) dispositivo que emite un sonido para que el perro relaciones con una acción.

Trabajaremos por medio del condicionamiento clásico que consiste en que tu perro asocie una señal (generalmente auditiva) o un gesto con algo agradable para él. La señal servirá para indicarle a nuestro perro que lo que acaba de hacer esta bien. Para enseñarle al perro lo primero que tendrás que hacer es enseñarle a asociar una señal (verbal, o sonora con el clicker) con algo agradable, como comida, o el juguete, después usaremos nuestra señal para indicarle al perro que lo que hizo esta bien, después procedo a entregarle su recompensa.

No procederemos con ejercicios hasta que el perro tenga claro lo anterior, también debemos tener sumo cuidado de no emitir la señal ni utilizar el clicker para nada que no esté relacionado con nuestras lecciones, evitemos que el clicker sea usado por niños o personas curiosas así evitaremos confundir a nuestro alumno.

Independientemente de la raza, los perros poseen una serie de conductas que le son propias de su especie, y como ha nacido para vivir entre perros, la única manera de que el animal aprenda a convivir sin problemas con las personas, es recibiendo una educación que tenga en cuenta su forma de conducta originaria.

Para el perro, al igual que para las personas, aprender significa acumular conocimientos y ponerlos en práctica. Un perro aprende siempre, por lo que la misión de su dueño, será influir en el contenido de ese aprendizaje. Como lo dijimos anteriormente el dueño debe ejercer autoridad sobre el perro, pues si no es así está renunciando a educarlo, y el perro se convierte en su propio maestro y pone en práctica el comportamiento característico de su especie, evitando lo que le molesta, y repitiendo lo que lo reporta algún beneficio.

El adiestramiento básico del cachorro debe comenzarse a partir de los cinco o seis meses de edad. En este período, es un error intentar educar al perro seriamente, algo que no se puede hacer hasta que el animal tenga un año o más.

Las primeras lecciones sólo se deben dedicar unos minutos diarios, posteriormente, iremos aumentando la duración de las clases, sin llegar a excedernos, con veinte minutos al día y después una buena dosis de juego es suficiente.

Empezaremos con su nombre. Los nombres cortos de dos o tres silabas máximo son más aconsejables. El nombre debe ser utilizado con frecuencia, pronunciándolo de modo claro, animado y mirándolo de frente. Dígalo mientras juegan juntos, lo acaricia o le da comida. Es recomendable entablar también una relación no verbal con el perro, encuadrando sus ojos con una mano, logrando así su atención, y pronuncie nuevamente su nombre.

Luego es necesario que se le enseñen las siguientes órdenes:

Sentado (Sit): Situar una mano sobre la cabeza del cachorro juntando el pulgar y el índice, como si le diera algo de comer, y llevándola en dirección al animal. Cuando el perro mire atentamente la mano, muévala hacia atrás, y si la sigue con la mirada, seguramente se sentará, cuando lo haga diga siéntate. También se puede hacer ejerciendo una leve presión sobre la grupa del perro, impartiendo la misma orden. Después de unas lecciones al perro le bastara sólo con la señal de la mano. La lección siempre deberá terminar con una efusiva felicitación seguida de la recompensa, siempre y cuando el perro haya ejecutado nuestra orden, esto también aplica para las demás órdenes.

Echado (Down): Una vez que sepa sentarse, no será muy difícil enseñarle a echarse. Al darle la orden de sentarse, al haberlo hecho, el adiestrador agacha en cuclillas junto a él, y halando las patas delanteras del perro hacia adelante y con una ligera presión sobre los cuartos traseros, el perro adoptará la posición deseada, y se le da la orden "échate" procurando que no se levante.
Junto: Teniendo el perro con su correa, se sienta el perro a la derecha del adiestrador, y mientras da la orden avanza, el adiestrador comienza a andar con el pié izquierdo, dando un ligero tirón de la cadena. Los desvíos se corrigen con ligeros tirones de la cadena. Una vez que haya aprendido a obedecer, se pueden introducir ligeras variantes: haciendo figuras en círculos, ochos, zig zag, etc. Recuerde felicitarlo cuando lo haga correctamente.

Quieto: Se sienta el cachorro a un lado del adiestrador, manteniendo la palma de la mano derecha frente a la cabeza del animal y se pronuncia la palabra quieto. Mientras, se avanza tranquilamente un poco hacia adelante, hasta colocarse frente a él, manteniendo la correa firme para evitar que el animal avance. Si logra ponerse en pié habrá que corregirlo diciendo "No” luego la orden Sentado - quieto" para que recupere la posición. En principio deberá mantenerse sentado de 10 a 15 segundos, lo suficiente para que el adiestrador se aleje, permanezca unos instantes frente a él, y vuelva a colocarse a su lado. Luego hay que ir aumentando poco a poco el tiempo que el cachorro ha de permanecer quieto, lo cual se hará cuando haya aprendido a hacerlo sin ayuda.

Viene: Teniendo aprendida la orden de quieto sujetaremos al perro con la correa larga y nos alejaremos de él suavemente nos colocaremos en inicialmente en una posición frente al perro, y con la señal viene y un gesto con la mano le indicaremos que acuda a nosotros, al mismo tiempo que ejercemos un pequeño tirón a la correa, para reforzar la orden. Daremos varia veces la orden inicialmente con nuestro perro en posición de quieto, después podremos ir enseñándole a venir a nuestro lado aún cuando el este en otra actividad, inmediatamente lo recompensaremos efusivamente, para reforzar el aprendizaje de esta importante orden, que nos va a ser muy útil y nos evitara muchos problemas si el perro la asume sin basilar.

El aprendizaje de estas órdenes básicas, son necesarias para comenzar cualquier etapa más avanzada de adiestramiento, lo cual le da a nuestro perro unas bases solidas para pasar al siguiente nivel.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Este Blog es un homenaje a mi gran perro Zeus, fidelidad, valentía, fortaleza y espíritu que lo hicieron un campeón, pese a no ser un perro con pedigrí siempre se destaco en competencia y se ha hecho querer como a ninguno.

Adiestramiento Canino


Zeus en competencia de Agility, bóxer de Jorge Marín
Zeus Marín (Q.E.P.D.)
 A la hora de trabajar con razas de perros podremos escoger muchas que por su aptitud y condición para el trabajo se han destacado por años, las razas que mencionaré son razas que aprenden fácil y sin necesidad de recurrir a golosinas o premios cada vez que ejecutan un mando correctamente, no quiero decir que adiestrar por medio de la técnica de la recompensa con golosinas no sea adecuada, si lo es y en algunos casos podremos utilizarla para adiestrar a nuestro amigo canino. Las razas que mencionare a continuación pueden adiestrase sin necesidad de este tipo re premios, dejo a su elección como entrenarlo, el resultado será el mismo.

El Bóxer, Gran Danés, Schnauzer mediano y Gigante, Pastor Collie, Doberman, Dogo Argentino, Airdale Terrier y Pastor Alemán son razas que debido a su temperamento y disposición aprenden fácil sin necesidad de golosinas, podremos trabajar con otras muchas razas pero su disposición no es la misma que el de las razas anteriores. Razas tan importantes como el Pastores Belga, el Labrador, y otras muchas más en las cuales encontraremos alumnos que aprenderán y nos sorprenderán con los resultados obtenidos después de un adiestramiento basados en una buena comunicación y buen trato.

Todo perro sin importar su raza debería ser adiestrado con el fin de lograr un mejor comportamiento de nuestra mascota en su nuevo hogar con el fin de crear un lenguaje mutuo con el cual nos comuniquemos con nuestro amigo, podremos adiestrarlo para trabajo, para defensa o simplemente para lograr una mejor convivencia en el hogar con nuestro perro.

Lo primero que tendremos en cuenta en lo posible es escoger un buen perro independiente de la raza que nos guste su temperamento será primordial si tenemos la posibilidad de escoger un cachorro procuraremos uno con buena disposición, que nos preste atención fácilmente y que no se distraiga ni pierda el interés en nosotros.

Un buen perro para adiestrar no deberá tener tendencias agresivas ni gusto por morder, estos hábitos que se manifiestan desde temprana edad no son buenas señales a la hora de escoger un excelente compañero. El buen perro además debe de ser calmado ante la presencia de otras personas, es falso creer que el perro más agresivo es el más valiente. Al momento de entrenar un perro para la guarda y la defensa pondremos sumo cuidado de no entrenar mal a nuestro perro y convertirlo en un peligro para la sociedad de allí la importancia de seleccionar un buen ejemplar y entrenar con un buen método a nuestro amigo, para evitar que encause mal lo aprendido.

El carácter de un buen perro será firme a las reprimendas, no será temeroso, o sumiso, no mostrará miedo hacia el entrenador, le mirara a los ojos y nunca de lado, un perro muy sometido o sumiso no resultara un buen alumno y será causante de muchos dolores de cabeza, por eso es tan importante saber identificar un buen ejemplar para el adiestramiento y más cuando se trata de entrenarle para la guara y la defensa. A su vez el entrenador también debe contar con características fundamentales para trabajar como adiestrador canino la relación hombre perro deberá ser muy armoniosa, para ello el adiestrador (a) deberá ser calmado, paciente, perseverante y tener tacto para obtener los mejores resultados. Las épocas en las cuales se entrenaban a los perros a punta de castigos y reprimendas ya ha pasado de moda quedando atrás ahora se entrena con tacto, amor hacia los perros, era común ver perros oficiales en eventos de obediencia que hacían maravillas pero con la cola entre las patas esto denotaba sumisión ante el guía por el maltrato recibido durante el período de adiestramiento, hoy vemos mejores resultados con perros que hacen su trabajo alegremente sin mostrar el más mínimo temor hacia su entrenador.

Sin Calma, sin medir ni dominar los nervios, se malogrará todo el programa de aprendizaje y al perro, y muy difícilmente podrá ser recuperado.

Sin el tacto que permite administrar suavidad y severidad durante el trabajo, sin llegar a someter ni maltratar a nuestro amigo rindiendo su carácter, se anularan por completo las cualidades innatas del perro y se le convertirá en un autómata sometido que trabajara mediocremente por darnos gusto por temor a un castigo. En el interior muy probablemente nuestro perro nos tendrá temor y hasta rabia por haberle convertido en un ser sometido sin personalidad.

La falta de perseverancia, reduce notablemente el rendimiento, ya que al intentar quemar etapas sólo se conseguirá confundir al perro evitando así una buena respuesta a la disciplina, que será la que finalmente formará unas bases sólidas para un buen trabajo amo perro.

María Alejandra con Zeus
El comportamiento canino es el resultado de diversas respuestas que van desde el simple instinto (inconsciente) hasta la reacción consiente a una orden que ha sido impartida por el instructor o guía. El proceso de aprendizaje es un proceso consciente y por eso debe de ir acompañado por experiencias gratas para el perro que le permitan desarrollar plenamente su potencial, para impartir una orden a un perro primero hay que trabajarle varias veces en un proceso de repetición y estimulo que cuya respuesta será la ejecución de la orden por el perro como un simple “Sit” sentado o “Down” echado, las ordenes deben de ser precisas para obtener una respuesta rápida, no bebemos confundir al perro siempre utilizaremos la misma palabra para cada orden acompañada por un gesto corporal por parte del guía, este último ayudara a reforzar la orden de una manera más eficaz. Así con repetición de ordenes de manera ordenada y paulatina iremos agregando una y otra hasta lograr un repertorio inmenso que hará de nuestro perro todo un ejemplo a seguir, las sesiones deben de ser amenas y no prolongarse mucho en el tiempo, tendremos que mantener la atención de nuestro perro y esto se logra no cansándole con rutinas largas y monótonas, es mejor enseñar una o dos órdenes y pasar al juego que querer enseñarle todo en un solo día, los perros son muy inteligentes pero si queremos tener buenos resultados mejor haremos las cosas con mucha calma y sin afanes.